Fuente: RunningColombia
Pocas veces el futuro se anticipa ante nuestros ojos, pero en el caso del atletismo mundial sucedió en Cali: ver a al jamaiquino Christopher Taylor es ver al relevo generacional de la velocidad. Romper el récord de los 400 metros planos en las jornadas de clasificación del Mundial de Menores y quebrarlo de nuevo en la final, con un tiempo de 45 segundos y 27 centésimas es una hazaña difícil de repetir, especialmente si se tiene en cuenta que la anterior marca la tenía Usain Bolt.
A su lado compitió el colombiano Anthony Zambrano, quien también impuso marca para nuestro país, con 46 segundos y 27 centésimas, cuando en la serie clasificatoria derrptó al propio Taylor.
Los dos atletas se volvieron a unir, esta vez fuera de las pistas, en la rueda de prensa organizada por la Iaaf para conocer sus impresiones de estos campeones del presente y el futuro.
“Me siento muy contento porque vine a Colombia a ganar, pero la verdad es que no me esperaba imponer el récord de mi país o la mejor del año”, admitió Taylor, quien se muestra tranquilo, paciente y sereno a la hora de contestar las preguntas de la prensa. Es su cara opuesta a la que tiene en la pista.
Por su parte, el finalista colombiano Anthony Zambrano mostraba otra faceta y convencido de su talento. “La mejor manera de correr los 400 metros planos es hacerlo con la mente y el corazón. Si sales muy rápido no llegas y si sales muy suave no haces la marca. Uno debe tener varias técnicas para poder correr esta distancia”, explica el atleta nacido en La Guajira y quien va a tomar unos días de descanso para empezar a preparar su participación en los próximos Juegos Nacionales.
Tanto Christopher como Anthony saben que lo único que los separa de un destino exitoso es el tiempo. Cuando llegue el momento, el talento de los dos los ubicará en la élite del atletismo. Por ahora, los asistentes al Mundial en Cali pueden estar satisfechos, pues en la pista del Estadio Pascual Guerrero ya pudieron ver una muestra del futuro.