Por CARLOS RODRÍGUEZ – AP
El colombiano Arnovis Dalmero no tuvo ahora problemas por culpa de las zapatillas y aunque no logró la marca para acudir a los Juegos Olímpicos de París, se marchó sonriente del Estadio Nacional de Santiago y con una medalla de oro brillando en el pecho.
Fue en el segundo día de las pruebas de pista y campo del atletismo de los XIX Juegos Panamericanos, este martes 31 de octubre. Dalmero conquistó el martes la medalla de oro del salto en largo de los Juegos Panamericanos, con lo que Colombia monopolizó los títulos en ambas ramas de la prueba. Natalia Linares, de 20 años, se alzó con el cetro femenino la noche del lunes.
Dalmero, de 23 años, se consagró con un salto de 8,08 metros que consiguió en su segundo intento.
“Contento y agradecido porque se dio el resultado que se tenía que dar agradecido con dios hice una buena marca”, dijo Dalmero.
Los cubanos Alejandro Parada y Maikel Vidal, ambos con registros de 8,01 metros, recibieron las preseas de plata y bronce, respectivamente. Parada tuvo un segundo mejor salto de 8.00 contra 7.85 de su compatriota.
La marca de 8,08 del colombiano está lejana de los 8,29 que marcó en el Campeonato Sudamericano que se realizó en Sao Paulo a fines de julio pasado, un registro que eventualmente fue invalidado porque sus zapatillas no contaban con las especificaciones exigidas. Usó un calzado propio para pruebas de medio fondo en vez de salto en largo.
Ese registro lo hubiera clasificado a los Juegos Olímpicos del próximo año. Y el fiasco de las zapatillas también le costó el viaje en agosto Budapest para disputar el Mundial de atletismo.
Aunque pudo buscar el boleto olímpico en Santiago, optó por no hacerlo.
“En el último salto tenía ya mucho frío en el cuerpo y las pantorrillas se me entumecían. No realicé el salto porque temía por una lesión, mejor descanso”, dijo el atleta. “Mi marca de hoy me deja contento”.
Dalmero dijo que la medalla de oro es un buen cierre a su temporada. Ahora descansará y buscará dar la marca mínima en sus próximos eventos.
“Esa marca del Sudamericano ya quedó así, se apeló y ya quedó, ahora hay que seguir entrenando. Mi familia y yo ya lo dejamos en el olvido”, agregó. “Vamos a trabajar si ya la hice una vez la puedo hacer de nuevo”.
Anulados aquellos 8.29 de Sao Paulo, Dalmero tiene como récord nacional los 8.20 que consiguió el 5 de agosto en Bogotá.
En esta noche de Santiago, Dalmero arrancó con un nulo, colocó 8.08 (viento de 1.7ms) en el segundo intento para tomar la delantera, cometió otros dos nulos y 7.87 en el quinto, rehusando su último salto, cuando ya se había asegurado la medalla de oro.
El uruguayo Emiliano Lasa estuvo muy cerca de repetir sus medallas de bronce del 2015 y 2019, ya que sus 8.00 metros del tercer intento lo colocaba en zona de medallas. Recién allí asomó el poderío de los cubanos y Parada alcanzó los 8.00 justos en el cuarto salto y los 8.01 que le darían el subcampeonato en el intento siguiente. Su compatriota Vidal –que venía con 7.85- recién consiguió los 8.01 para desplazar a Lasa en el quinto salto.
El quinto puesto fue para el peruano José Luis Mandros con 7.70, sexto quedó el brasileño Wesley Bevilacqua Beraldo con 7.65 y séptimo, con la misma marca y registro personal, el local Vicente Belgeri.
Historial
El título de Dalmero es el primero que obtiene un atleta de Colombia en esta disciplina de salto en largo, donde nunca habían logrado una medalla.
Grandes figuras del atletismo mundial enriquecieron con su participación el salto en largo de los Panamericanos. Nada menos que Carl Lewis es el poseedor del récord de los Juegos con 8.75, logrados al obtener la medalla de oro en Indianápolis (1987). El “Hijo del Viento” –quien por estos días visita Santiago como invitado especial de la organización- ya había participado en los Juegos de Puerto Rico 79, donde –con 18 años- obtuvo la medalla de bronce con 8.13. En esa oportunidad, venció el brasileño Joao Carlos de Oliveira con 8.18, reteniendo la corona lograda cuatro años antes en México con 8.19.
Entre los predecesores de esa generación estaba el recientemente fallecido Ralph Boston, otro de los grandes protagonistas olímpicos de la década del 60, quien ganó los Panamericanos en Sao Paulo 63 con 8.11 y retuvo en Winnipeg con 8.29. Allí quedó segundo su compatriota Bob Beamon (8.07), el mismo que un año después iba a estremecer los Juegos Olímpicos de México con su fabuloso récord de 8.90, considerada la más impresionante maximarca en la historia del atletismo mundial.
El máximo ganador del oro panamericano en salto en largo es el cubano Iván Pedroso, actual entrenador de Yulimar Rojas, quien obtuvo los títulos de 1995 con 8.50, 199 con 8.52 y 2003 con 8.23, además de la medalla de bronce en 1991. Aún participó en 2007, quedando cuarto en la prueba ganada por el campeón olímpico y mundial Irving Saladino, de Panamá, con 8.28.