Este jueves 1° de julio en el estadio Bislett, en Oslo, se vivió una jornada histórica para el atletismo mundial: el noruego Karsten Warholm batió el WR de los 400 metros con vallas con 46 segundos 70 centésimas, mejorando los 46s.78 que el estadounidense Kevin Young mantenía desde los Juegos Olímpicos de Barcelona (6-8-92) y que constituía el más antiguo entre los primados de pista en las tablas atléticas masculinas. Y el brasileño Alison Brendom Alves dos Santos, de apenas 21 años, llegó segundo con 47s.38, delante del turco Copello, para volver a mejorar el récord sudamericano u-23 y absoluto, bajando los 47s.57 logrados el 28 de mayo en Doha (Qatar) en otra etapa de la Diamond League.
Alison es, sin dudas la aparición más notable del atletismo sudamericano en estos últimos años. En 2019 y todavía con edad de junior, Alison fue medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima, en la Universiada de Napoli y en el Sudamericano de mayores, además de arrasar con todos los títulos de su propia categoría, cerrando esa temporada como finalista en el Mundial de mayores en Doha, en su primer encuentro con el grupo liderado por Warholm. A principios de esta temporada se concentró en California y luego ingresó con todo a las competiciones: llevó el récord sudamericano absoluto a 47s.68 el 9 de mayo en Des Moines, Iowa, y veinte días más tarde lo bajó a 47s57 en Doha, por la Diamond League, en carreras ganadas por el estadounidense Rai Benjamin, el mismo que viene de marcar 46s.83 en los Trials de su país en Oregon y que será otro de los garndes contendientes en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Warholm consumó hoy su hazaña delante de 5.000 espectadores que lo alentaron en todo momento en el mítico estadio Bislett, escenario de tantos récords mundiales.
Warholm y su joven compatriota Jakob Ingebrigtsen -mediofondista- prometen hazañas para su país en los próximos Juegos.