La colombiana Caterine Ibargüen abandonó los Mundiales de atletismo de Londres «con la frente alta», pese a no haber podido retener su corona mundial ante la venezolana Yulimar Rojas en la final del salto triple.
«Me voy con la frente alta y contenta. Ahora hay que seguir. Lo único que me faltó fue que fuera oro. Hay que seguir compitiendo», afirmó Ibargüen, después de tener que conformarse con la plata en la prueba que había conquistado en los Mundiales de Moscú 2013 y Beijing 2015.
«Yo pensé (que lo tenía) con mi tercer salto, pero esto era lo que me tocaba hoy», añadió la estrella colombiana que, con 14,89, se quedó a tan sólo dos centímetros de la victoria. «Parece que el tiempo de Londres no gusta mucho de mí. Pero siempre me voy sonriente y hay que seguir adelante», agregó Ibargüen, que en los Juegos de Londres 2012 fue subcampeona olímpica. Pero cuatro años más tarde, en Rio y en otro memorable duelo con Yulimar, logró su primer título de los Juegos.
Pese a la rivalidad que mantiene con la venezolana, Ibargüen felicitó a la nueva campeona por su oro, celebró el talento del atletismo sudamericano y deseó que «ojalá», algún día, las atletas de la región ocupen «el puesto uno, dos y tres» del podio.
«Me voy con la frente alta y contenta. Ahora hay que seguir. Lo único que me faltó fue que fuera oro. Hay que seguir compitiendo», afirmó Ibargüen, después de tener que conformarse con la plata en la prueba que había conquistado en los Mundiales de Moscú 2013 y Beijing 2015.
«Yo pensé (que lo tenía) con mi tercer salto, pero esto era lo que me tocaba hoy», añadió la estrella colombiana que, con 14,89, se quedó a tan sólo dos centímetros de la victoria. «Parece que el tiempo de Londres no gusta mucho de mí. Pero siempre me voy sonriente y hay que seguir adelante», agregó Ibargüen, que en los Juegos de Londres 2012 fue subcampeona olímpica. Pero cuatro años más tarde, en Rio y en otro memorable duelo con Yulimar, logró su primer título de los Juegos.
Pese a la rivalidad que mantiene con la venezolana, Ibargüen felicitó a la nueva campeona por su oro, celebró el talento del atletismo sudamericano y deseó que «ojalá», algún día, las atletas de la región ocupen «el puesto uno, dos y tres» del podio.